- no pasa nada, sólo un parpadeo del sol, un movimiento apenas, nada, no hay redención, no vuelve atrás el tiempo, los muertos estan fijos en su muerte y no pueden morirse de otra muerte, intocables, clavados en su gesto, desde su soledad, desde su muerte sin remedio nos miran sin mirarnos, su muerte ya es la lectura de su vida, un siempre estar ya nada para siempre, cada minuto es nada para siempre, un rey fantasma rige tus latidos y tu gesto final, tu dura máscara labra sobre tu rostro cambiante: el monumento somos de una vida ajena y no vivida, apenas nuestra, -¿la vida, cuándo fue de veras nuestra?
Esta confianza en la bondad natural de la vida, o en la infinita riqueza de sus posibilidades, es cierto que no se encuentra en la más reciente literatura norteamericana, que más bien se complace en la pintura de un mundo sombrío, pero era visible en la conducta, en las palabras y aun en el rostro de casi todas las personas que trataba.4 Por otra parte, se me había hablado del realismo americano y, también, de su ingenuidad, cualidades que al parecer se excluyen.
Esto que se me escapa, agua y delicia obscura, mar naciendo o muriendo; estos labios y dientes, estos ojos hambrientos, me desnudan de mí y su furiosa gracia me levanta hasta los quietos cielos donde vibra el instante; la cima de los besos, la plenitud del mundo y de sus formas.
Vi que se venían muy aprisa los fríos y el gabán que yo tenía estaba ya todito hecho garras, por eso fui a Zapotlán a conseguir una frazada.
Baste apuntar que a los treinta y ocho años, precisamente cuando se apagó mi estrella, ostentando el grado de General Brigadier y el mando del 45° Regimiento de Caballería, disfrutaba yo de las delicias de la paz hogareña, acompañado de mi señora esposa (Matilde) y de la numerosa prole que entre los dos hemos procreado, cuando recibí una carta que guardo hasta la fecha y que decía así:...
Últimamente la muchacha ha quedado imbécil, y se ocupa en dibujar figuras incomprensibles y figurines como los de periódicos de modas, siendo de advertir que ni en su estado normal ni en ninguna de las otras nueve personalidades aprendió a dibujar ni demostró aficiones artísticas» En un libro francés especialista encontré asimismo las siguientes páginas que traduzco: «El alma es una cosa compleja; su unidad no existe sino con relación al individuo que se reconoce en lo que él llama su yo.
LA SEÑORITA ETCÉTERA ARQUELES VELA La Señorita Etcétera © 2024 Arqueles Vela Oscar Sierra-Pandolfi Edición hondureña 2024 Solamente para fines culturales.
JUAN RULFO DATOS BIOGRAFICOS —Pocas obras como la breve y fulgurante del mexicano Juan Rulfo (Jalisco,1938 — Ciudad de México, 1986) convocan tanta admiración y universal estima.
Vacilaciones 2 Es importante el lance de piezas donde Paz, al iniciar con motivos liricos que tienen como paisaje la naturaleza, el sol, el mar, la montaña y corporiza, espiritualiza, ferviente, cálido, digno, hondo, universal, tiradas las palabras sobre el césped, Paz, subraya su pasión por lo humano y la naturaleza que sobreviene de los filosofa griegos, Heráclito, el no volver andar en las mismas corrientes, además, del fruto convertido en cuerpo, la piedra convertida en sol, la flor en piedra, la sed en agua, y el agua en sal.