El erotismo en la novela posmoderna
Oscar Sierra Pandolfi
Los vicios del poder, Linda María Concepción Cortés. Una novela irónica, erótica, fuerte en su atmosfera, anquilosada en el poder femenino, lo insensible, el sexo elevado a la potencia, se equipara una sensación voluble del narrador cuando uno discurre en la textura de los párrafos, y va vibrando en las voces de los personajes, en escenas que nos llevan a los sentidos, nos invaden el adentro y el afuera, hay un poderío del deseo deleuzeano, Battaille a la orden, el agenciamiento maquinico del goce, la frase, la palabra, esquiva, acertada me conmueven a ser parte de la textualidad, de esas pasiones instintivas heredades del animal salvaje. Es un estilo que nos envuelve fugaces y eternos, en una especie de abysm de amor sin amor, de sexo al gang bang de abejas tiernas en el picor del éxtasis, me conmoví al empezar esta lectura tersa, descarnada, bien construida de una autora que tiene olfato para abrir la piel de la mujer, y evocar la seducción de todos sus artefactos labiales. No es la carne convertida en mercancía, no es el hombre cabrío que se somete, es Sade, en una versión que imbrica una visión incrédula del amor. Ademas, que el concepto de poder en palabras de Sposito, Gramsci, Vattimo, entre muchos, la novelas tiene una infinidad de topic que tratar, y su enorme fuerza literaria, la capacidad de manejos de diversos recuerdos, como el efecto de una cinta de Moebius, no veo que la linealidad atraviesa ontológica, hay sus discretas intenciones de lograr no solamente disyuntar al ser humano que ha perdido sus capacidades espirituales y que actúa acorde a la muerte del del eros.
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