​La Nueva Trova Cubana. Por: Alex Palencia

La Nueva Trova Cubana

Por: Alex Palencia.

Fue ICAIC el proyecto a través del cual desde 1967 don Leo Brouwer le dió vuelta o revoluciono la música Cubana, y del cual surgiera lo que después conocimos a principios de la década de 1980 como "Nueva Trova Cubana"; y quizás sea esté el proyecto más exitoso de la historia de la música en américa latina, en dónde por lo menos diez de los treinta estudiantes de la primera generación de este proyecto, entre cantautores y jazistas han logrado el reconocimiento internacional: Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Amaury Pérez, Sergio Vitier, Sara González, Pablo Méndez, Eduardo Ramos, Emiliano Salvador, Paquito de Rivera y Noel Nicola.

La idea del gran maestro Brouwer era, que la música cubana hecha bajo los principios estéticos de clichés populares de alguna manera impuestos desde el gusto de la burguesía de ese país ya no daban para más, y estaban obsoletos y agotados: el bolero, el mambo, el son montuno, la guaracha, el chá chá, y el danzón, estas eran músicas que ya habían dado lo que tenían que dar, por lo tanto era necesario y urgente hacer una música revolucionaria bajo otros principios estéticos, creando nuevos clichés para la música popular cubana y que a la vez estos fueran universales.

Así Brouwer armó un colectivo al cual llamó "Grupo de Experimentación Sonora del ICAIC" con jóvenes identificados como talentosos, para formarlos a través del estudio que iba desde los conocimientos básicos de: literatura, poesía, armonía, contrapunto, solfeo, técnica del instrumento, arreglos y composición, al análisis de las formas de la música cubana desde los primeros cantautores, además de las músicas clásicas, étnicas, Folk, folklóricas, rock y jazz. O sea desde Bach, Mozart, Bethoven, Ravel, a los Beatles, Bob Dylan, Jacques Brel, Rolling Stones a Robert Jonhson, Miles Devis pasando por Héctor Villalobos, Manuel Ponce, a Astor Piazzolla, Atahualpa Yupanqui, Milton Nacimiento y otros. Hay que agregar que el sistema de aprendizaje implementado por Brouwer era alternativo y moderno, los módulos se dan de acuerdo a la necesidad y se terminan cuando estos fueran asimilados por todos, sin importar el tiempo, o sea; que podían durar días , semanas o meses: según fuera el caso.

Otra preocupación de Leo Brouwer era que estos alumnos pudieran llevar sustentos a sus familias, pues la mayoría de ellos ya eran adultos con obligaciones familiares, así inventó de que los mismos fueran quienes hicieran o crearan la música que ambiantarian los programas de la televisión y de las producciones estatales cinematográficas cubanas, trabajo que se haría de acuerdo a cada necesidad y como producto de las mismas clases impartidas en forma de taller.

Esta idea del Instituto de Experimentación Sonora Cubana, aunque era revolucionaria, tuvo sus detractores incluso en los propios círculos del nuevo gobierno cubano, quienes no estaban nada de acuerdo con la propuesta de Brouwer, al cual por un tiempo le hicieron la vida imposible, pero este más inteligente que sus detractores se las ingenió para salirse con la suya; al ser vetada la música de sus discípulos en la radio y televisión estatal por considerar que hacían una musica que no se apegaba a los estándares de la música tradicional cubana, y la cual supuestamente debería ser promocionada desde el gobierno revolucionario. Pero Leo Brouwer tenía claro que era hacer música revolucionaria, que no es lo mismo que decir contestataria, al mismo tiempo no estaba dispuesto a seguir haciendo una musica generada desde los parámetros de referencia de la vieja y hegemónica clase dominante, aunque entendía que habían raíces de las cuales partir para desde estas crear una verdadera música nueva que fuera cubana y la vez universal como una real propuesta revolucionaria.

Pero la resistencia a su incomprendido proyecto fue tal por parte de las autoridades del nuevo gobierno revolucionario, que este y sus alumnos y alumnas tuvieron que idear un nuevo plan para llegar al imaginario colectivo, y así, se olvidaron de la Habana y se adentraron en las zonas del interior de Cuba, presentándose en escuelas y colegios, ferias y festivales de pueblo, entretanto su música siguió siendo vetada en las radios y televisión estatal, fue un trabajo que duró algunos años hasta que el éxito en estas zonas rurales de estos nuevos y modernos trovadores fue tal, que de alguna manera sus ecos llegaban a la gran ciudad, al final la radio y televisión del Estado Cubano tuvo que abrir sus puertas a los nuevos rebeldes de la música que ya eran coreados por gran parte de la juventud cubana y reconocidos como los artistas representantes de la revolución, y quienes paradójicamente, estaban siendo reconocidos en gran parte del continente americano a través de grabaciones que llegaban a las manos de estudiantes universitarios que pertenecían a movimientos estudiantiles disidentes y contestatarios, y así, estalló el boom de la música de la Nueva Trova Cubana que estremeció el mundo undergrauond no solo de América Latina sino, de gran parte del mundo occidental. Gracias a la idea genial del guitarrista, compositor y maestro Leo Brouwer quien hoy día es menos conocido en el mundo de la música popular que sus famosos y aclamados discípulos.

Tal como decía mi abuela:" mijo las cosas buenas no nacen de la nada".